Cuando empezaste tu Operación Bikini esperabas conseguir los resultados deprisa y que fueran visibles. Vas al gimnasio pero no consigues reducir esos kilitos. La Operación Bikini se te está haciendo cuesta arriba, y el no ver los resultados implica desmotivación y ganas de rendirse. No tires la toalla tan pronto. Es evidente, que algo estamos haciendo mal. Revisa las claves de tu entrenamiento y modifica los errores. Seguro que así consigues resultados.

1. ¿Te has marcado un horario?

No basta solo con ir al gimnasio cuando tenemos ganas, o cuando nos viene bien. Planifica tu entrenamiento con días y horas concretos. Si no eres constante y te cuesta organizarte, te proponemos que cuentes con un entrenador personal. Se adaptará a tus horarios y te ayudará a conseguir los objetivos que te propongas. En nuestro gimnasio puedes contar con Aktivados, entrenamiento personalizado.

2. Tu forma física

Si llevas mucho tiempo de vida sedentaria te va a costar más que si estás acostumbrado/a a hacer ejercicio. Es importante que revises tu estado físico cuando empieces a hacer ejercicio, para trabajar en la intensidad que necesitas y evitar lesiones.

Utiliza tu sentido común, si hace tiempo que no practicas deporte, no empieces corriendo, comienza andando en la cinta. No te lances al ciclo indoor, puedes comenzar con el pilates.

Si estas acostumbrado a realizar ejercicio, planteate retos y superarte a ti mismo. Será la mejor opción para no aburrirte ni desmotivarte.

3. Qué objetivos te has marcado

Perder unos kilios, tonificar, mejorar tu forma física, eliminar el estrés... los objetivos pueden ser muchos, pero antes de lanzarte a hacer ejercicio, párate a pensar cúales son tus ibjetivos y qué quieres conseguir. No realizarás las mismas actividades para perder peso que para tonificar. Si quieres reducir esos kilos, opta por actividades de tipo aeróbicas, como el Cycling, Zumba, SH'Bam, etc. Si quieres tonificar, las actividades de fuerza y tono,  como Body Pump, o CX Worx serán las más adecuadas. O por ejemplo, buscas una actividad que te relaje y te quite el estrés, el Yoga y Pilates te vendrán fenomenal.

4. No dejes de cuidar tu alimentación

Además de llevar tu entrenamiento de forma constante, la alimentaciónno debes descuidarla. Si no comes de forma adecuada, te notarás más cansado/a y no rindas lo suficiente en tu entrenamiento. Sigue una dieta equilibrada y sana, evitando los fritos, dulces, etc.

En nuestro servicio de Nutrición y Dietética, Nuttralia, te ayudarán a comer sano y de forma equilibrada.

5. Esfuérzate de verdad

Esto significa que no te acomodes en una rutina de ejercicio. Si siempre haces lo mismo, tu cuerpo se acomoda y no mejorará. También es importante realizar los ejercicios de forma correcta. Pide consejo a nuestro Equipo de Instructores, estarán encantados de ayudarte y aconsejarte.

6. Busca alternativas para mantener tus rutinas de entrenamiento

Entrenamos todo el invierno, nos ponemos las pilas en primavera, y cuando llegan las vacaciones, nos olvidamos de todo. Es conveniente que busques alternativas de ejercicio cuando no tienes cerca tu gimnasio, como suele pasar durante las vacaciones. Siempre puedes salir a caminar, o correr. Si aprendes tu rutina de entrenamiento, puedes realizarla en un parque, o incluso en la playa.

7. Ante todo, diviértete.

Si cuando entrenas, no te resulta divertido, te cansarás rápido y te desmotivarás. Encuentra una actividad física que te guste, como por ejemplo, el Cycling. El superar el reto en cada sesión y la música resulta muy motivadora para muchos de los que lo practican.

La clases de baile como Zumba o SH'BAM, son muy divertidas, y el pilates, resulta muy relajante. Encuentra la actividad más adecuada para ti, y que te haga disfrutar.

8. El entrenamiento debe ser lo más completo posible.

Realiza tanto entrenamiento de tipo aeróbico como de tonificación, Hay que entrenar de forma equilibrada, realizar los estiramientos necesarios, y ejercicios de corrección postural.

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